Los objetivos en un proceso de entrenamiento son consensuados entre el entrenador, los deportistas y, en su caso, la directiva. Todos deben formar parte del proceso y acordar objetivos ambiciosos pero reales y que beneficien a todos.
Por ello fijaremos los objetivos de manera que podamos involucrar a todas las partes posibles, hablando y comparando diferentes puntos de vista para llegar a un punto común.
Esta fase condicionará las siguientes ya que es fundamental saber a dónde queremos llegar para marcar un camino.